La Fundación Migra Studium, entidad del Sector Social de la Compañía de Jesús que forma parte de la red del Servicio Jesuita a Migrantes ha vuelto a hacer visible una vez más su solidaridad y compromiso con las personas internas en el Centro de Internamiento de Extranjeros de la Zona Franca de Barcelona.
La entidad ha hecho público recientemente el informe “Opaci(e)tat. Què hi està passant?” sobre la situación en este centro durante el 2021. Las visitas presenciales a los internos fueron prohibidas durante 170 días. A partir de junio, una resolución judicial, instada por Migra Studium, obligó a la reanudación de las visitas presenciales. La dirección de este CIE impuso unas “condiciones operativas” que han obstaculizado el desarrollo de la labor de acompañamiento, entorpeciendo el derecho de visitas de internos, familias y organizaciones de la sociedad civil.
En el informe también se denuncia que, según los datos aportados por el propio Ministerio del Interior, 51 personas internadas fueron aisladas en habitaciones de separación temporal, yendo mucho más allá de las lógicas medidas sanitarias y/o higiénicas para imponerlas otros de difícil justificación a la luz de los derechos fundamentales.
El equipo de visitas de Migra Studium sólo pudo acompañar, a lo largo de 2001, a 23 de las 397 personas internadas en el centro. De nuevo se ha podido constatar la hostilidad que representa el CIE hacia las personas migradas.
Para dar a conocer todo esto y mostrar la solidaridad con los internos y sus familias, Migra Studium celebró el pasado 1 de octubre una vigilia de oración frente al CIE. Se adhirieron más de 50 entidades y el encuentro fue un clamor para no desfallecer en la construcción de un futuro cercano sin CIE.
