Alumnos de Migra Studium y de Jesuïtes Clot conviven y aprenden juntos

La semana del 15 al 19 de octubre la escuela de Jesuïtes El Clot de Barcelona abrió sus aulas a los alumnos y profesores del curso de Electricidad de la Fundación Migra Studium.

Durante cinco días los alumnos de Migra Studium compartieron clases y prácticas con alumnos y profesores de primero del Grado Medio de Instalaciones Eléctricas y Automáticas de Jesuïtes El Clot. Una colaboración entre instituciones de los sectores social y educación que ha regalado a estos jóvenes cinco días de aprender juntos, de compartir espacios y conocimientos, de convivir y darse la oportunidad a conocerse mutuamente.

El último día, la experiencia acabó con la invitación a los compañeros y compañeras del Clot a conocer Migra Studium, para que así vieran de primera mano el trabajo que realiza esta entidad del sector social de la Compañía de Jesús, que forma parte de la red del Servicio Jesuita a Migrantes. Los jóvenes pudieron disfrutar de una visita personalizada al Espacio Interreligioso, donde la experiencia y vivencia de cada uno fue el centro. Y antes de terminar comiendo juntos, se repartieron los certificados de reconocimiento de la formación recibida durante la semana.

Migra Studium destaca especialmente dos aspectos de este proyecto conjunto que, de forma muy acertada, se denomina "Convivir y Aprender". La primera es que "confirmamos de nuevo que la convivencia con otros nos hace aprender, siempre y cuando sea una convivencia que promueva espacios abiertos y compartidos, espacios para todos, espacios que nos hagan salir de nosotros mismos para encontrarnos con el otro, y acoger cada persona con todo lo que es, incluso a nosotros mismos."

Y la segunda es el agradecimiento. Ha sido necesaria la colaboración de muchas personas para hacer posible esta experiencia, y es de agradecer especialmente la dedicación de los profesores y profesoras de los dos grupos, así como a los alumnos y tallerista del curso de Ayudante de Cocina de Migra que, desinteresadamente y de forma voluntaria, ofrecieron la comida del último día.