Ejercicios Espirituales siguiendo con el ritmo de la vida cotidiana

Cuando hablamos de Ejercicios Espirituales pensamos enseguida en una estancia larga en una casa de espiritualidad, abandonando totalmente las rutinas de la vida de cada día, poniendo distancia con los espacios y las personas con quienes compartimos habitualmente nuestro tiempo.

Pero un escenario como este es inviable para muchas personas que quizás sienten la necesidad o el deseo de hacer Ejercicios Espirituales, de releer la propia vida y descubrir hacia dónde enfocar el futuro. No es necesario renunciar a ella, porque los Ejercicios Espirituales se pueden practicar sin dejar los compromisos de la vida cotidiana, reservando un tiempo diario para la oración. Eso sí, requiere voluntad y cierta disciplina, en definitiva un cierto orden para compaginar el ritmo de la vida diaria con los espacios de silencio y oración que requieren los Ejercicios.

Las personas que optan por este formato han ido aumentando en los últimos años y el curso pasado en Cataluña ya hubo más de 40 participantes. Se trata de personas con una media de 40 años que ya tienen un recorrido de vida familiar y profesional y no pueden retirarse totalmente durante un período largo de tiempo.

Tal como sucede en los Ejercicios en la modalidad más clásica, quien los hace cuenta con un acompañante, con quien se entrevista cada semana para ofrecer unas orientaciones. El papel del acompañante es clave para guiar el camino que se va haciendo. Puede ser útil utilizar un diario personal, para anotar como avanza la experiencia. Todo ello para ayudar a vencer las dificultades que seguro aparecerán para compaginar las actividades diarias y la práctica de los Ejercicios.

Podría parecer que esta es una manera poco fiel a Ejercicios originales, o una adaptación para salir del paso. El jesuita y coordinador de los Ejercicios en la Vida Cotidiana que ofrecen los Jesuitas en Cataluña, David Guindulain, lo desmiente. De hecho, San Ignacio ya contemplaba esta posibilidad, que al contrario de rebajar la experiencia, ofrece una oportunidad para orar en toda ocasión, integrando en la dinámica de los Ejercicios, lo que pasa en el día a día.

La propuesta de los Ejercicios en la vida cotidiana para este curso ya se ha presentado. El inicio será a mediados de octubre y la información se puede consultar en este enlace.