Hoy sábado ha empezado a caminar el grupo de 22 personas que durante una semana recorrerán a pie el último tramo del Camino Ignaciano entre Lleida y Manresa (unos 150km), para participar en la experiencia de los ejercicios espirituales en camino. Se ofrece una experiencia física y espiritual, en medio de la naturaleza, haciendo los Ejercicios Espirituales de San Ignacio en esta modalidad especial de la peregrinación en grupo.
Es una propuesta singular que hace la Compañía de Jesús en Cataluña y que se lleva a cabo por tercera vez. La primera edición se realizó durante el Año Ignaciano en 2022, y se hizo todo el Camino Ignaciano desde Loyola. Este año se repite el formato del año pasado, el tramo Lleida-Manresa en una semana. La iniciativa ha tenido muy buena acogida y un impacto inolvidable para los peregrinos y peregrinas.
Las personas que participan forman parte de diversas entidades, grupos o instituciones de los Jesuitas en Cataluña. Lo hacen motivadas, sobre todo, por caminar, por el contacto con la naturaleza y por la combinación de todo ello con la interioridad, el silencio, los ejercicios espirituales, y la necesidad de hacer una parada, y hacerla en comunidad. Y es que esta experiencia tiene una dimensión personal importante, con momentos de silencio, que permiten conectar con la vida interior y la naturaleza, y también una fuerte dimensión comunitaria y compartida, como lugar de encuentro y de construcción de vínculos.
Existe diversidad tanto en la edad como en la procedencia de los participantes. La franja de edad va desde los 23 años de los más jóvenes hasta los 73 de los peregrinos más veteranos. Se encontrarán personas que desarrollan su actividad en centros educativos, organizaciones sociales o en comunidades e iniciativas vinculadas al ámbito pastoral. También hay diversidad en muchos aspectos, situaciones de vulnerabilidad, de salud, de cambios de etapa personal o laboral, de búsqueda de orientación o reorientación vital, de los momentos del proceso espiritual en el que cada uno se encuentra... Todas las personas tienen cabida.
Empiezan ahora una semana de camino, una experiencia que quiere ser cercana y austera, de cuidado, participación e implicación entre todas las participantes. Os invitamos a vincularos, también, en la distancia, a esta experiencia, siguiendo el camino de este grupo a través de nuestras redes sociales.