Ante los hechos que han tenido lugar esta semana en Badalona, las entidades del sector social de la Compañía de Jesús en Cataluña han manifestado la necesidad de poner en marcha estrategias de acogida que pongan en el centro a las personas en situación de mayor vulnerabilidad. Las entidades advierten que no estamos ante un caso puntual, sino de unos hechos dramáticos que ponen de relieve la vulneración de derechos que sufren muchas personas que malviven en infraviviendas. Y denuncian la falta de recursos y respuestas adecuadas por parte de las administraciones.
Lo hacen especialmente las dos entidades del sector social que trabajan en la ciudad de Badalona acompañando y dando apoyo social y educativo a niños y familias en situación de vulnerabilidad. El Centre Sant Jaume lo hace muy cerca de la nave que ha sufrido el incendio. Su director, Grau Usetti, lamentaba y denunciaba, en estas declaraciones recogidas por Catalunya Religió, que las administraciones se hayan desentendido de las condiciones de vida de las personas que vivían en la nave y no se haya hecho ninguna acción preventiva. Por ello el Centre Sant Jaume pide una respuesta coordinada para dar respuesta a situaciones como ésta, desde una mirada acogedora y de hospitalidad.
También lo hace la Fundació Salut Alta, en este caso desde otro barrio de la misma ciudad de Badalona. "Las entidades seguimos trabajando por una Badalona más humana y acogedora, y reclamando a la Administración que haga su trabajo", asegura su directora Maria Nadeu, que advierte que en la ciudad hay miles de personas viviendo en infraviviendas. Para esta entidad el incendio de la nave en el barrio del Gorg "pone de relieve la constante vulneración de derechos en nuestra casa". De hecho, las dos entidades del sector social de la Compañía de Jesús en Badalona vienen denunciando desde hace tiempo, junto con otras organizaciones de la ciudad, el agravamiento de la situación de la infravivienda, y pidiendo a las administraciones que resuelvan la situación para las familias afectadas.
Por su parte, Migra Studium, en un comunicado difundido este jueves ponía de relieve que la incapacidad para acoger conlleva que muchas personas tengan que malvivir, hasta llegar a extremos tan dramáticos como el que ha causado la muerte de tres personas en el incendio de Badalona. La entidad pide que se pongan en marcha de forma urgente los recursos necesarios para evitar que hechos como estos vuelvan a pasar, así como la flexibilización de los procesos de regulación y el reconocimiento de los derechos humanos de las personas migrantes y el derecho a migrar.
