"Sed misterio en comunión, siempre en tensión hacia la misión"

"Sed misterio en comunión, siempre en tensión hacia la misión". El arzobispo de Barcelona, Mons. Juan José Omella, eligió estas palabras de Juan Pablo II para resumir la idea que quería transmitir a todos los miembros y comunidades del Casal Loiola, en su visita el pasado sábado 21 de enero.
 
Durante la tarde, Omella presidió la Eucaristía, se reunió con el Patronato y participó en un diálogo abierto sobre el futuro de la Iglesia. El arzobispo invitó a todos los miembros del Casal a "vivir en comunión dentro de la Iglesia, aglutinante y sumando" y, a la vez, a "estar siempre en tensión hacia la misión, saliendo a la calle y siendo cristianos activos en la sociedad".
 
La visita, que tenía como objetivo conocer de primera mano la labor pastoral de la casa, comenzó con una reunión de presentación de las comunidades, entidades e iniciativas que tienen el Casal como base de sus actividades. Posteriormente, Juan José Omella aceptó participar en un diálogo abierto con cerca de un centenar de asistentes sobre el futuro de la Iglesia. Moderado por el periodista Oriol Llop, se abordaron temas como la baja participación en muchas parroquias de la ciudad o la falta de un mensaje entusiasmador para los jóvenes.
 
Para el arzobispo de Barcelona, "nadie debe perder la esperanza" y defendió vivir la fe como "un regalo único". Omella reconoció que los jóvenes a veces no se identifican con los cristianos y se alejan de la Iglesia porque "los adultos somos los primeros que no somos coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos". Ante la pregunta de cuál es el objetivo que quiere lograr en los próximos cinco años, Omella respondió que "la comunidad cristiana en Barcelona sea viva". El tono del diálogo estuvo lleno de anécdotas personales, recuperando sus orígenes como rector de pueblo por tierras aragonesas.