Profesorado de Jesuïtes El Clot, Jesuïtes Sarrià-Sant Ignasi y Jesuïtes Gràcia-Col·legi Kostka han participado este mes de marzo en un encuentro impulsado por la Comisión de Ecología de la Compañía de Jesús y el sector de Educación (EDUCSI), para compartir experiencias e iniciativas en relación con proyectos y actividades de educación medioambiental.
El encuentro se celebró en Valladolid y reunió a profesores y profesoras de diferentes etapas educativas y diversas escuelas de la Compañía de Jesús en toda España. Fue una buena ocasión para escuchar atentamente y reconocer que está emergiendo un tiempo nuevo para la educación medioambiental que, más allá de actividades concretas, constituye un reto social de gran magnitud.
Y es que no estamos hablando de una moda, o de un área de interés de algunas personas. Se trata de tomar conciencia de que la sostenibilidad nos interpela hoy respecto a nuestra forma de ser ciudadanos y ciudadanas de este mundo, de vivir como sociedad.
Una charla a cargo del profesor de INEA Pedro Piedra ayudó a los asistentes a reflexionar sobre este momento de transición socioambiental. En su ponencia recordaba cómo hemos vivido instalados en una idea de progreso basado en vencer a la naturaleza, y hoy vemos que la vida humana sólo es posible si su presencia es compatible con la naturaleza. Por eso es necesario desaprender y desenmascarar muchas falacias construidas a lo largo del tiempo.
Y a partir de ahí, invitaba a ir construyendo con la empatía, la emoción, los cuidados, un humanismo comprometido. Conscientes de que es un tiempo de equilibrios, promover alianzas y sumar a todos aquellos que se van haciendo conscientes de los desafíos que afrontamos. Y todo esto desde la pasión como educadores, porque el deseo de transformar moviliza.
Las enormes posibilidades que este cambio puede generar en el ámbito educativo se pusieron de relieve al escuchar las experiencias presentadas por los participantes y que ya están en marcha en diferentes centros educativos, con alumnado de las diversas etapas, también en algunos casos con las familias, en los claustros o también con el entorno y el vecindario.
También se apuntaron propuestas para seguir trabajando en el futuro y que ayuden a pasar de actividades aisladas a concepciones integradas en nuestros centros.
El encuentro tuvo lugar en la Comunidad de Acogida Ana Leal de Valladolid. Precisamente un espacio en el que la ecología integral se hace concreta y viva. Se trata de un espacio comunitario donde están acogidas familias inmigrantes y refugiadas, así como personas que quieran hacer un período de voluntariado o experiencia, en un marco en sintonía con el cuidado de la Casa Común que inspira a Laudato Si: vida sencilla, ecológica, cuidando y trabajando en un proyecto agroecológico.